Cuando oyes jamba de la puerta es como oír un cuento chino, no nos extraña. Pero no te preocupes porque todos los días se aprende algo nuevo.
Si eres propietario de una casa necesitas saber este tipo de conceptos para poder tener tu casa siempre a punto.
A lo mejor lo escuchas como tapea de la puerta, pero es el mismo concepto. Si eres una persona inquieta sigue leyendo porque te vamos a contar qué es, sus tipos y cómo repararla.
Qué es una jamba de la puerta
Una jamba de la puerta es algo mucho más sencillo de lo que estas pensando. También conocido como tapea de la puerta, se trata de un complemento estético que se usa para tapar la unión entre el marco de la puerta y la pared.
Se utilizan en todo tipo de puertas. No solo en las de entrada y salida de las estancias, si no que también se colocan en armarios y muebles.
La jamba de la puerta, además de su función embellecedora, hacen las puertas más seguras y con un mayor aislamiento.
Si escuchas la palabra jambaje tampoco te asustes, se trata del conjunto entre las dos jambas y el dintel del marco de una puerta o ventana.
Al trabajo que hacen los carpinteros de instalar la jamba de una puerta se le llama guarnecer el marco.
Ahora ya sabes un poco más sobre el concepto, y aunque parezca que no, te será muy útil si tienes tu propia casa.
Tipos de jamba.
Dependiendo del tipo de puerta donde se vayan a instalar la jamba de la puerta tendremos que escoger un tipo de jamba de la puerta u otro.
Hay varios tipos de jamba y te vamos a guiar para que los diferencies y coloques el que más se adapta a tus necesidades.
Jambas Molduradas:
Como su nombre índica, se trata de una jamba de la puerta con molduras grabadas. Se suelen utilizar para puertas más rústicas y armarios empotrados. Son jamabas clásicas.
Para que el encuentro entre la jamba superior y la inferior sea perfecto, se tienen que cortar a 45 grados.
Este tipo de jambas suelen estar hechas de madera, aunque se pueden encontrar de otro tipo de materiales.
Jambas Lisas:
Son piezas lisas, sin molduras ni curvaturas. Se trata de una jamba de la puerta muy sencilla y estilosa que actualmente se utiliza cada vez más.
Tienen un estilo minimalista que encaja a la perfección con las puertas que se instalan hoy en día.
Este tipo de jamba no necesita ser cortada en 45 grado ya que no es necesario que ningún patrón coincida como pasa en las jambas molduradas.
Jambas según el material:
Dentro de las jambas molduradas o lisas, podemos hacer también una diferenciación según el tipo de material del que este formada la jamba de la puerta.
Pueden ser de madera maciza, rechapadas con una lámina de madera natural, melaminadas recubiertas con una hoja de papel melaminado o lacadas (que generalmente suelen ser blancas)
Cómo reparar jamba de la puerta
La jamba de la puerta puede sufrir daños con el paso del tiempo. Ya sea por golpes, arañazos o por descuelgue. El paso del tiempo no pasa en balde ni para las jambas.
En ocasiones necesitarás sacarlas o repararlas para que tus puertas se vean siempre como nuevas. Una jamba descolgada hace un efecto muy descuidado.
Con una espátula podrás ir separándo la jamba. Tendrás que utilizar la espátula como si fuera una palanca.
Tendrás que colocar la espátula entre la jamba de la puerta y la pared e ir dando pequeños golpes hasta que veas que se va desprendiendo. No debe costarte mucho, ni emplear una gran fuerza.
Servicio prestado por AFS Group. Insertando tu teléfono, aceptas la política de privacidad En ocasiones la jamba de la puerta irá anclada con clavos, en tal caso, tendrás que soltarlos con unas tenazas antes de hacer palanca.
Te recomendamos que tengas paciencia si quieres conservar la puerta y la pared en buenas condiciones. Una vez sacada tendrás que limpiar bien la zona para que quede lisa. Finalmente aplicar adhesivo en tu nueva jamba de la puerta y en la pared para proceder con cuidado a pegarla.
Si no estas muy seguro de realizar esta tarea, no te preocupes, puedes contar con un técnico carpintero para ello.
Pide Presupuesto gratis